Aún recuerdo cuando los extranjeros paraban sus coches en la antigua carretera (hoy Avenida de Andalucía) a la altura de las escuelas de San Sebastián, todavía sin hacer, para fotografiar las eras que colindaban a ambos lados de la calzada. En el apogeo de la recolección y trilla había un inusitado bullicio en esta zona. Incluso algunos turistas se subían a las máquinas y disfrutaban de alguna vuelta a la parva.

En cierta ocasión me dijo un agricultor que las había contado y habías más de de 400. Es más, se sabía los nombres de cada uno de los dueños. Como muestra podéis ver en las fotos restos, escasos, de algunas ya abandonadas y que nos enseñan tímidamente su alineación de piedras.

Antaño, casi toda la población vivía y trabajaba en el campo. En el mes de mayo ya comenzaba la actividad de las eras: los mayores chafando las hierbas del empedrado; los niños faltando a la escuela para ir a la "arranquina" de beza y yeros; los carros “balcinando” la mieses y un largo etcétera de faenas que empalmaban los días con las noches porque pronto llegaría septiembre y las yuntas de mulos deberían empezar la "ariega" arando los secanos, dando con ello el principio de un nuevo ciclo agrícola y de vida.

La eras se encontraban en los siguientes lugares: Junto al convento de las monjas y en el mercado y en el colegio de San Sebastián (precisamente ahí, en la de las "Moralas” gané mis primeras pesetillas siendo trillero) comenzaban las primeras. El que esto os cuenta estaba un día dando, vueltas y más vueltas con la yunta en la parva y observando un gran bullicio de personas en la era cercana de “ Los Marquesitos” habían traído al pueblo la primera "ablentadora" mecánica. Prácticamente estuvieron todo el día para ponerla en marcha pero no hubo forma de conseguirlo. Hubo que esperar a la mañana siguiente en que llegó el técnico y comenzó, según recuerdo, un avance importante en el trabajo agrícola en nuestra Villa.

Pasada la carretera, hacia el cementerio, se encontraba la era de “Los Álamos” ( en la feria hacía de campo de fútbol y allí se localizaban los ganados y feriantes) y el mayor número de ellas, hasta sobrepasar lo que hoy es el IES La Laguna.